Es cierto que Rusia y Ucrania han estado vinculadas por varios siglos. Pero eso no significa que sean iguales. Se trata de dos naciones con historia y mentalidad diferentes, aunque sus lenguas sean cercanas.
Hay un punto en que ya no sabemos cuál soberanía está defendiendo el presidente López Obrador, dice defender la soberanía del país, pero todo indica que lo que quiere decir es que “con nuestros narcos nadie se mete”.
El resultado de las manifestaciones del 8M, debe ser la construcción de una agenda para la transformación cultural de México hacia la igualdad, la inclusión y la paz. Para que esta agenda sea efectiva, debe involucrar al gobierno y a la sociedad como un todo y contemplar acciones alineadas y contundentes en los tres niveles del cambio cultural: la infraestructura, la estructura y la superestructura.
La apuesta de López Obrador es, llevar a mucha gente a las urnas el 10 de abril, por ello necesita generar lo que en neuromarketing se conoce como estímulos, para sus seguidores y para aquellos que aún son susceptibles de ser convencidos.