El embajador de Estados Unidos de Norteamérica en México, Ken Salazar reconoció que el tráfico de armas desde su país es un problema “gigantísimo” que no se va a resolver en meses o un año, ya que se calcula que el 70% de las armas que llegan a territorio mexicano son de fabricación estadounidense.
A pregunta expresa, señaló no obstante que es la primera vez en la historia de su país que el tráfico de armas es considerado un delito grave; sin embargo, aclaró que su erradicación es una responsabilidad compartida entre los gobiernos de Estados Unidos y México.
El diplomático también aseguró que se han logrado avances en el combate del tráfico de armas y señaló como parte de estos esfuerzos la creación de una plataforma conocida como “e Trace”, que sirve para rastrear un arma cuando es utilizada, tan solo con meter la información del armamento en una plataforma.
“Nada más con los esfuerzos que llevamos en un programa que se llama “e Trace”, donde se puede rastrear el uso de un arma, de una delincuencia acá, se puede meter a una plataforma compartida y ya podemos saber dónde es.