Un total de 2 mil 678 observaciones o irregularidades preliminares, por un monto superior a los 300 millones de pesos, detectó la Auditoría Superior de Michoacán en la revisión de la Cuenta Pública Estatal y municipales correspondiente al 2021, donde quedarán sujetos a responsabilidad integrantes de los ayuntamientos salientes y entrantes, así como del gobierno que encabezó Silvano Aureoles Conejo y del actual a cargo de Alfredo Ramírez Bedolla.
En conferencia de prensa, el responsable de la Fiscalización, Miguel Ángel Aguirre Abellaneda precisó que 1 mil 983 observaciones corresponden a los ayuntamientos y 695 al gobierno de Michoacán, donde las Secretarías de Comunicaciones y Obras (SCOP), así como la de Finanzas y Administración (SFA), junto con Pátzcuaro, Morelia, Zamora y Uruapan, acumularon el mayor número de presuntas irregularidades.
A nivel estatal, lo más recurrente es asignar recursos a programas sin justificarlo con documento y el cobro de recargos por retraso en el pago de impuestos, mientras a nivel municipal, la falta de comprobación del gasto.
El titular de la ASM señaló como uno de los temas más preocupantes el de la obra pública, ya que, por primera vez, las observaciones se acompañaron con prueba de laboratorio y ejemplificó con el caso del puente que se construyó sobre avenida Siervo de la Nación.
El auditor de Fiscalización, aseguró que cumplió con el 100% de las 439 auditorías que le mandató el pleno legislativo, por lo que también detectó que no reportaron en su totalidad la recaudación propia algunos entes autónomos obligados como la Universidad Michoacán de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) y el Colegio de Bachilleres, así como Unidades Programáticas Presupuestales (UPP), como las Secretarías de Salud (SSM) y de Cultura (SECUM)