El secretario de Gobierno, Carlos Torres Piña afirmó que pese a que los delitos de alto impacto, como el homicidio doloso han ido a la baja en Michoacán, se mantiene la disputa por el control del territorio entre grupos criminales, en específico, en las regiones de Morelia y Uruapan, que son las de mayor incidencia de hechos violentos.
En entrevista, señaló que hace un año, este problema se presentaba principalmente en Zamora y Sahuayo.
“En general, el tema de delitos de alto impacto sí ha disminuido, sigue habiendo una disputa entre grupos, que eso es lo que genera las fricciones, los decesos que luego se tienen en algunas regiones. Hace un año, el conflicto fue Sahuayo-Jiquilpan, Zamora-Jacona, que han disminuido en un 40%, Zamora les he dicho llegó a estar en primer lugar como la ciudad más violenta del país hace un año”.
Informó que a raíz de la problemática se implementaron una serie de operativos que permitieron la baja en la violencia, de tal manera que durante 8 días de marzo no se registró ningún homicidio en esa región.
No obstante, reconoció el recrudecimiento de la pugna entre delincuentes en las regiones de Uruapan y Morelia, donde precisó que la principal preocupación se centra en la zona de Tarímbaro y Copándaro, por “la profundidad del conflicto que se genera en la zona”.
““Ha bajado Zamora, ha bajado Sahuayo, ha incrementado Morelia, ha incrementado Uruapan. (…) Pareciera que es lucha de control por la zona, por las rutas, por las regiones, y los operativos que se han generado están enfocados en este sentido”
El responsable de la política interna aseguró que en Tierra Caliente la situación es “relativamente tranquilo” y el tránsito para la ciudadanía no representa ningún problema, al precisar que “el desajuste” lo generan los conflictos entre grupos criminales.