Bajo el argumento de que faltaba una firma en el dictamen, Yanitzi Palomo Calderón y Sheida Barajas Birruetas no pudieron rendir protesta ante el Congreso de Michoacán, como suplentes de las diputadas del PAN, Andrea Villanueva Cano, por el distrito 11 de Morelia y la experredista, Fanny Arreola Pichardo, del distrito 23 de Apatzingán, actualmente integrada en la Representación Parlamentaria.
Inconformes con la determinación del Congreso, luego que en la orden del día se había considerado que rendirían protesta, hicieron un exhorto escrito a la presidencia del Congreso local, para advertir que se violaría la debida integración y funcionamiento del órgano e incluso podrían incurrir en violencia en razón de género, ya que, por el contrario, sí se permitió que el suplente de Juan Carlos Barragán Vélez rindiera la protesta de ley.
Palomo Calderón advirtió que, de retrasar este procedimiento, presentarán denuncia de Juicio Político ante el Tribunal Electoral del Estado, ya que incluso habría un vacío de poder, porque no había representante del distrito 23 de Apatzingán y el 11 de Morelia.
“Hicimos entrega de un llamamiento a la diputada Ivonne, que respeten los derechos políticos electorales, tanto de Sheida y de su servidora, en caso de que no proceda nos iremos a un juicio para hacer valer nuestros derechos político electorales, éramos 3 y solo nuestro compañero varón va a rendir protesta, entonces están incurriendo en violencia política en razón de género y en vacío de poder. (…) Falta una firma que es de Reyes Galindo”.
Señalaron que Fanny Arreola y Andrea Villanueva solicitaron licencia para separarse del cargo a partir del 10 de abril, por lo que sus posiciones estarían vacías.
En respaldo a las diputadas suplentes, la legisladora priista, Adriana Hernández Íñiguez consideró que lo ocurrido es una muestra más del mal trabajo que se ha hecho en la LXXV Legislatura, donde el proceso electoral ha mermado incluso las sesiones plenarias.
“Pareciera que hay una presión directamente en algunos casos, no quisiera hacer una acusación directa, para que no puedan tomar protesta, sobre todo quienes son suplentes del PRI, esto es una violación al derecho de las legisladoras a pedir licencia, pero también al derecho de las suplentes de tomar protesta y que es necesario, porque hay mucho trabajo por hacer.”.
Coincidió en el señalamiento de que el Congreso pudiera incurrir en violencia política de género, ya que solo se tomó protesta al suplente de un diputado de Morena.
Calculó que una de las preocupaciones es que el PRI pudiera arribar a la presidencia de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), por el número de diputados que alcanzaría, ya que ambas legisladoras suplentes son priistas y se integrarían a ese grupo parlamentaria.
