Cerca de 2 mil vapeadores y cigarrillos electrónicos han sido suspendidos en Michoacán desde el 31 de mayo, que entró en vigor el decreto del gobierno federal, que prohíbe la circulación y comercialización en el país de estos productos denominados Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina.
Sin embargo, el director de la Comisión Estatal para la Protección de Riesgos Sanitarios (COEPRIS), Hebert Israel Flores Leal informó que, pese a la disposición federal, los artefactos siguen bajo el resguardo de sus propietarios en espera de que el proceso legal concluya, ya que ellos deben acreditar su registro sanitario y de no hacerlo, entonces se procede al aseguramiento.
El funcionario estatal, señaló que de manera paradógica, estos productos entran de manera ilegal al país, pero al no dar a los propietarios la oportunidad de defenderse, en Querétaro la autoridad sanitaria perdió un amparo por faltas al debido proceso “y tuvieron que regresar la mercancía”.
Flores Leal advirtió que se utiliza una mercadotécnica dirigida a jóvenes y niños, a los que comienzan a darles dosis pequeñas de nicotina para hacerlos adictos.
Sin embargo, reconoció que al momento, los vendedores o comercializadores de vapeadores o cigarrillos electrónicos no pueden ser sujetos a proceso penal y sancionados, ya que ahorita las acciones son contra un producto y no por la comisión de un delito.