Morelia, Mich.- A pesar de que ya concluyó la construcción de la unidad de hemodiálisis de Zinapécuaro y en óptimas condiciones, el espacio permanece cerrado por falta de equipo, personal médico y administrativo, así como medicamentos, denunció la diputada Belinda Hurtado Marín, del Partido del Trabajo (PT).
“Lo más difícil ya está hecho. Solo se necesitan alrededor de un millón de pesos para instalar las 12 máquinas y ponerla en operación. La gente no puede seguir trasladándose a Ciudad Hidalgo o Morelia para recibir tratamiento”, señaló la legisladora por el Distrito de Hidalgo.
Hurtado advirtió que la enfermedad renal está en aumento en el Oriente de Michoacán, con comunidades como San Pedro Jácuaro, en Ciudad Hidalgo, especialmente afectadas. Estimó que tan solo en esa cabecera municipal podría haber entre mil y mil 500 pacientes, aunque no existe un padrón oficial.
La diputada insistió en que el problema no se resuelve con más hospitales, sino con prevención y diagnóstico, e hizo un llamado a los gobiernos estatal y federal a intervenir de inmediato. “Exhorto a todas las autoridades a que no se detenga este proyecto. La unidad ya está lista; lo que falta es voluntad para equiparla y echarla a andar”, subrayó.
Recordó que la obra fue impulsada por el expresidente municipal y el exgobernador Silvano Aureoles, pero desde su conclusión permanece sin uso.