La emergencia sanitaria del COVID-19 ha provocado que un gran número de empresas constructoras en Michoacán hayan perdido fuentes de empleo o hayan frenado labores ante la falta de liquidez y la mínima operación durante la cuarentena. Al respecto el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en el estado, Antonio Mazier Contreras celebró la deteminación del presidente Andrés Manuel López Obrador de considerar a dicho sector como una actividad esencial en su Plan de reactivación.
“Estamos muy complacidos que por fin se haya hecho caso, ya que nosotros activamos la economía y era importante que se declarará como esencial la industria de la construcción, lo que queremos es que ahora empiece a subir el trabajo, que empiecen a activar la economía de manera muy decidida, con los generan valor e inyectan dinero a la economía”.
Luego de que la CMIC representa a 188 empresas constructoras en el estado, en entrevista para PostData, el dirigente constructor señaló que el 20 por ciento de ellas pararon labores a raíz de la pandemia y alrededor del 30 por ciento desde antes no contaban con obra.
“El 20% paró labores por causa de la pandemia, otro 30% ya venía sin trabajo en los últimos meses, entonces estaba trabajando más o menos el 40 por ciento de los constructores, el otro 60 % estaba en la banca”.
Mazier Contreras informó que cerca del 10 por ciento de las empresas de la construcción, es decir, aproximadamente 20, definitivamente cerrarán sus puertas ante la crisis económica derivada del COVID-19.
“Si va haber empresas que definitivamente cierran sus actividades en el sector de la construcción. Unas 20 empresas cierran por completo, son 10% “.
Finalmente hizo un llamado a la federación a reactivar la economía formal y no fomentar la informalidad ya que considera sería una catástrofe.