Ante la ambigüedad que existe en la ley para regular el uso de los cañones antigranizo, la Secretaría del Medio Ambiente de Michoacán, retomará de nueva cuenta los estudios para determinar si el uso de estos aparatos inhibe o no las lluvias.
Ante las posturas encontradas, el titular de la dependencia, Alejandro Méndez López, informó que analizarán los estudios que ya se han hecho en la entidad, pero aseguró que las autoridades serán conciliadoras para evitar conflicto en las comunidades, ya que existen antecedentes de conato de violencia, debido a que hay quienes defienden el uso de estos aparatos y otros aseguran que afectan los ciclos de la lluvia.
“Hay cierta ambigüedad en la ley para regular este tema, lo que hemos buscado es la concertación. Coincido que es un tema que debería de estudiarse porque hay evidencias en favor y en contra del uso de estos cañones. Lo que hemos estado buscando es concertar en donde hay focos rojas ya de conatos de violencia y retomando los estudios que ya se han hecho, viendo cómo está la regulación y poniéndolo a la disposición del ejecutivo como de los legisladores y nos permita actuar con base en la ley”.
En entrevista el funcionario estatal, detalló incluso, que buscarán un acercamiento con el Instituto de Ciencia, Tecnología e Innovación para que los académicos instruyan sobre el tema, a fin de no generar políticas públicas por impulso y ocurrencias.
Pese a no precisar cuántos ni en donde sería necesario instalar cañones antigranizo en Michoacán, señaló que las zonas de relevancia, sería en aquellas regiones en donde se cultivan frutillas y aguacate, debido a que los productores buscan proteger sus cosechas.