A casi 6 meses de que Diego Urik Mañón Melgoza fue sentenciado a 50 años de prisión por el feminicidio de Jessica González Villaseñor, el caso no ha concluido; en audiencia oral, este miércoles pidió relevar a los dos abogados públicos que durante 45 días se prepararon para defender la apelación que presentó y nombró a uno de los litigantes particulares que llevó su defensa durante meses.
Escoltado por 6 elementos de seguridad penitenciaria, el joven fue ingresado a la sala de oralidad, anexa al Centro de Readaptación Social “David Franco Rodríguez”, donde se encuentra recluido desde el 1 de octubre del 2020.
En esta ocasión, el Diego sentado en la audiencia parecía otra persona, con un corte de pelo descuidado, tez más morena y facciones pequeñas, incluso más delgado de lo que se vio en otras sesiones del juicio.
La audiencia fue encabezada por el magistrado Gilberto Alejandro Bribiesca Vázquez, a quien el feminicida de Jessica González informó su determinación de revocar la designación que tenían una defensora y un defensor público, quienes durante 45 días conocieron de los agravios esgrimidos en la apelación que presentó el despacho de abogados particulares que tuvieron a cargo su defensa.
Explicó que en su lugar, designaría a uno de los litigantes que llevó antes el caso, aunque el abogado dijo no estar “impuesto de los agravios” que tenía que defender.
Verónica Villaseñor Ferreyra, mamá de la víctima, demandó que se haga efectivo su derecho a la justicia, al denunciar que sólo se toman en cuenta los derechos del “asesino de su hija”, cuando es evidente que el nuevo abogado conoce el caso y estuvo presente durante prácticamente todo el juicio oral.
“Están cuidando los derechos del asesino de mi hija, que solo quiere dilatar, dilatar.
¿En qué momento va a parar esto? ¿Cuándo van a dejar de causar daño?”
La asesora victimal, Lorena Bedolla Ponce, coincidió con los señalamientos de Verónica Villaseñor y recordó que el nuevo abogado era parte del despacho que defendía a Diego Urik, por lo que debía conocer los motivos de inconformidad de la apelación.
“Los cambios solo tienen fines dilatorios”, acusó.
Los representantes de la Fiscalía General del estado (FGE), manifestaron su inconformidad por la incertidumbre que generan y recordaron que ya se había prorrogado 45 días el caso por el nombramiento de los abogados públicos, pero ahora se postergará todavía más.
Pese a los señalamientos, el magistrado concedió al abogado particular los 45 días que solicitó para conocer los 13 escritos de agravio presentados, al precisar que de no hacerlo “violentaría el derecho a una defensa técnica adecuada”.
“Debo ser cuidadoso para que nadie pueda inconformarse”, afirmó ante la evidente inconformidad de los asistentes a la audiencia, luego de que el propio integrante del Poder Judicial lo consideró “un caso complejo”, que se ha desahogado en 31 audiencias, que tuvieron una duración de 119 horas, 16 minutos y 45 segundos.
El magistrado, explicó que la fecha exacta se definirá de acuerdo a la agenda de trabajo del tribunal.
El feminicida pide que se reponga el procedimiento por el que se le consideró culpable del feminicidio de Jessica González Villaseñor, luego que el juez consideró que se aportaron las pruebas suficientes para determinar el grado máximo de culpabilidad.
El joven argumenta diversos agravios, entre ellos, que no se le permitió exhibir algunas pruebas y que la descripción del delito de feminicidio establecida en el Código Penal del estado se presta a confusiones, incluso que se violentó la presunción de inocencia del joven, ya que se calcula que se registraron más de 20 millones de visualizaciones de su imagen al ser detenido.