El presidente de la Asociación de Mexicana de Distribuidores de Automóviles (AMDA) en Michoacán, Juan Pablo Arriaga Diez rechazó el programa de regularización de vehículos de procedencia extranjera que arrancó el gobierno federal en Michoacán y 9 estados más, al señalar que además de “legalizar algo ilegal”, repercutirá de manera directa en una disminución de hasta 30% en las ventas y en consecuencia en la pérdida de empleos directos.
Señaló que son coches de desecho para el vecino país del norte que llevan a una sobreoferta en el mercado y, en consecuencia, a que el valor del resto de las unidades disminuya.
El líder empresarial, explicó que los vehículos que se busca regularizar fueron internados por mafias a través de sobornos que se repartieron en la frontera entre ambos países, mientras que a nivel nacional afecta a los ciudadanos que pagan “religiosamente sus impuestos”.
Arriaga Diez previó que para contener el impacto que esto representará, los distribuidores de automóviles tendrán que disminuir su plantilla laboral, ya que esto se suma a las afectaciones por la pandemia y por la falta de chips que ha enfrentado el sector en los últimos años.
En Michoacán, el proceso para la regularización de vehículos de procedencia extranjera arrancó este 1 de febrero.