Morelia, Mich.- El candidato a la segunda Sala Civil del Poder Judicial de la región Morelia, Jesús Sierra Arias calificó al Instituto Electoral de Michoacán (IEM) como omiso y negligente durante este proceso electoral judicial, al asegurar que hay al menos 30 perfiles cuyos expedientes están incompletos.
También expresó su preocupación por el uso de “acordeones”, al referir que las personas que apenas hicieron campaña de pronto resultaron ganadoras, y refirió que es una contradicción democrática y un indicio claro de que la situación no está bien.
Agregó que es obligación constitucional de las autoridades electorales verificar que quienes obtuvieron la mayoría de votos cumplan con los requisitos de elegibilidad, pero la ley local inexplicablemente flexibilizó de manera indebida el promedio académico y la experiencia profesional, por lo que no solo concede ventajas indebidas a personas sin experiencia jurisdiccional, sino que mina la calidad de la justicia y la confianza de la sociedad.
Se refirió específicamente a dos casos de candidatos que tienen documentados: Enoc Barragán Estrada y José María Cázares Rosales, que no cumplen con los requisitos constitucionales exigidos. Sin embargo, alertó que podrían ser más los que no tienen cumplimiento de los requerimientos, pese a que la Constitución Federal es muy clara en este tema.
Dijo que hay omisiones y deficiencias deliberadas y están negando derechos fundamentales a los candidatos de todo un auténtico sistema democrático. Reiteró que llevará a cabo un recurso legal para exigir el recuento de votos, así como la revisión de la solicitud extemporánea de requerimientos que el organismo electoral ha hecho a algunos candidatos.
Sierra Arias refirió que el IEM le negó la posibilidad de un recuento de votos bajo el argumento de que es un proceso inédito.
“El pasado 16 de junio me enteré por la prensa y después por la notificación que me hizo el Instituto que el Consejo General aprobó negar la posibilidad de un nuevo escrutinio y cómputo a otros candidatos y a su servidor. El argumento de ellos es simple y a la vez falaz y consiste en que el proceso de elección de los juzgadores para ellos es inédito y carece de regulación expresa, pero la pregunta es ¿es aceptable por parte del IEM? Para mí no, y precisamente por eso, por ser inédito, es que el IEM, en el uso de sus facultades constitucionales, tenía la obligación, y la tiene desde mi perspectiva, de garantizar los principios de certeza, legalidad y máxima transparencia”, concluyó.