Una descoordinación muy fuerte entre el gobierno del estado y la federación en materia de seguridad, señaló el gobernador electo de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, quien pidió al mandatario en funciones, Silvano Aureoles Conejo, asuma la responsabilidad hasta el último día de su administración, el 30 de septiembre.
“Sí se nota y denota una falta de coordinación en esta materia entre el gobierno del estado y el gobierno federal, una descoordinación muy fuerte”.
En conferencia de prensa, señaló que la estrategia de seguridad de su gobierno estará en plena coordinación con el gobierno de la República, pero cuestionado sobre si implementará la política de “abrazos y no balazos”, señaló que son conscientes de su responsabilidad de perseguir al crimen organizado.
“Se tiene que perseguir a los grupos criminales, eso está en la ley, es nuestra obligación, el tema es cómo se hace, desde qué perspectiva, con qué estrategia y eso lo vamos a presentar, estamos en eso, no me quiero adelantar al tema”.
El diputado con licencia, no descartó que el actual gobierno esté adelantando la crisis financiera que ha derivado en manifestaciones de policías y la toma de las vías del tren en Caltzontzin por integrantes del magisterio, al señalar que cada año se presentaba hasta octubre y no en julio como ha ocurrido.
“Normalmente los problemas financieros de Michoacán inician en octubre, en octubre es cuando ya no hay recursos para pagarle a la Universidad Michoacana, ya no hay recursos para pagarle al magisterio, pero ahora pues se está adelantando, estamos en julio, hay una gran cantidad de policías que no les han pagado, ya comenzaron los problemas del pago para el magisterio y esto nos llama mucho la atención”.
Informó que gracias a las gestiones que realizó en los últimos días ante las instancias federales, se acordó extender el programa Sembrando Vida a la Región Sierra Costa, así como a la zona Lacustre.
Precisó que con el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoe Robledo se retomará la intención descentralizar sus oficinas centrales a Morelia, por lo que se proyectaron algunas áreas, con trabajadores de confianza, que podrían mudar a las instalaciones del antiguo penal “Francisco J. Múgica” o las instalaciones de FIRA.