Morelia, Mich.- Al menos 50 mujeres han sido revisadas de manera exprofeso por las áreas de salud en Morelia y han sido canalizadas para ser atendidas por cáncer de mama, indicó, el director del Instituto Municipal de Salud, José Murguía Magaña, al señalar que en el 2023, las revisiones han aumentado debido a que la gente acude con más frecuencia.
Refirió que, por cada mil mujeres, hay un hombre con cáncer de mama, el año pasado hubo dos casos reportados en Morelia, pero aclaró que llegan a tener una complicación mayor, además de que en personas trans que hacen modificaciones a su cuerpo, aumenta en un 50 por ciento el riesgo de tener cáncer de mama.
Nuria Gabriela Hernández Abarca, directora del Instituto de la Mujer Moreliana para la Igualdad Sustantiva (INMUJERIS), reconoció que persisten violencias alrededor de las mujeres para que no acudan al médico, ya que muchas llegan con un cáncer muy avanzado, cuando se les pregunta por qué tardan tanto en asistir a la revisión se encuentran con que los maridos no las dejaban.
“Mi marido no me dejaba que me revisaran mi cuerpo, los senos, el tema del cáncer Cervicouterino, existe muchísimo los tabúes, existen estudios a nivel nacional como estas violencias simbólicas hace que las mujeres no vayan a una detección de cáncer, dejarse al final”, indicó, al precisar que mujeres que tienen cáncer, son abandonadas, estigmatizadas por la sociedad.
Celerina Chagolla Gamiño, sobreviviente de cáncer, si bien señala que contó con una red de apoyo que le permitió sortear de mejor manera el cáncer de mama que enfrento y originó que le retiraran la parte afectada, expresó que conoce casos de mujeres que al igual que ella vive esta enfermedad y son abandonadas por sus familias.
Ella, es un caso de éxito, ya que se vio apoyada por su esposo y familia, “mi esposo, mi familia, me apoya muchísimo, todos me apoyan, amistades, bendito dios, ese sufrimiento no lo tengo, he conocido de personas que me han platicado que se separan por la enfermedad, es cuando debemos estar más unidos con el esposo, la familia, los hijos, las amistades”, dijo.
María Angélica Rosales Nicanor, también sobreviviente, si bien ha logrado sortear con el apoyo de su familia esta enfermedad, admitió que fue una mujer que dejó de revisarse y nunca fue prioridad, lo que generó que su cáncer entrara a la etapa dos.
“Si pasó eso conmigo, por estar uno más al pendiente de la familia, de los hijos, del quehacer, se deja uno mucho, no se pone uno mucha atención, yo empecé con esa bolita en mi pecho, no me hice caso, como no me dolía, cuando decidí hacerme los estudios me dicen que tengo cáncer de mama”.