Desde el 2 de mayo, en 15 planteles las clases fueron suspendidas por trabajadores de la educación homologados no transferidos del nivel Medio Superior y Superior en el estado que forman parte de la fracción “Poder de Base” de la CNTE, debido al adeudo de 300 millones de pesos en bonos.
Aunque la expectativa era parar labores en 40 escuelas, Abraham Aparicio Rosas, secretario de Trabajos y Conflictos, expuso que los estudiantes de 7 municipios resultaron afectados por la falta de soluciones gubernamentales.
“Nuestro paro indefinido lo iniciamos el lunes y vamos a continuar la ruta hasta que obtengamos nuestra solución pertinente. En este momento tenemos 15 planteles parados de nuestro subsistema, en Lázaro Cárdenas, Uruapan, Pátzcuaro, Chilchota, Zitácuaro, Angangueo, Morelia y Zinapécuaro”
Hasta el momento, detalló, el gobierno estatal informó que gestiona los recursos económicos con la Federación para más de 5 mil docentes, por lo que no regresarán a las aulas hasta ver avances en la atención de su problemática.