La recuperación de diferentes prestaciones pendientes de pago desde el 2019 y el romper con el “tope salarial” que se establece cada año para docentes activos y jubilados, demandó el líder del Sindicato de Profesores de la Universidad Michoacana (SPUM), Ramiro Silva Orozco, al gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, durante el evento oficial, en el que firmó la promulgación de la Reforma Constitucional que otorga a la autonomía plena a la Casa de Hidalgo.
Le compartió que pese al avance que esto implica en el ámbito financiero al abatir el déficit presupuestal nicolaita, en su recorrido por la Universidad recibió diversas demandas de los docentes, por lo que pidió al mandatario encontrar un esquema para recuperar los recursos.
“Deseamos compartirle que en nuestro reciente recorrido por la universidad recibimos diferentes demandas de prestaciones no pagadas por nuestro sindicato a la planta docente sindicalizada. Desde el año 2019 en adelante se dejaron de pagar prestaciones tales como pago de marcha, recuperación de cuotas, aportación voluntaria, caja de ahorro, seguros de vida, entre otras”.
En su intervención, pidió a Ramírez Bedolla que “no abandone a la planta académica activa y jubilada” de la Universidad Michoacana, al recordar que los topes salariales afectan el salario que reciben, ya que el incremento que se autoriza cada año es igual o menor a la inflación
“Los topes salariales han venido deteriorando el salario de quienes trabajamos en la educación media superior y superior, ya que en términos reales al incrementarnos cada año un porcentaje por debajo o igual a la inflación hace que nuestro salario decrezca. Tenemos la confianza de que se atreva a romper con los topes salariales y realmente obtengamos las y los docentes universitarios un incremento salarial digno cada año. Los formadores de profesionistas merecemos mejores condiciones de trabajo y de vida.”
El líder sindical solicitó también que los docentes universitarios sean “escuchados” en el proceso que aún falta para definir la nueva Ley Orgánica universitaria, así como las reformas al estatuto y el reglamento, al considerar necesario que sea “el diálogo” el que guíe esta parte legislativa.