En Michoacán no se han encontrado campos de exterminio utilizados ni se tienen reportes que hagan suponer su existencia, afirmó el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, quien descartó que se hayan encontrado restos de michoacanos desaparecidos en las fosas que denunciaron madres buscadoras en el Rancho de Izaguirre, localizado en Teuchitlán, Jalisco.
En breve entrevista, consideró que los señalamientos del dirigente del PRI, Guillermo Valencia Reyes, quien denunció la existencia de estos lugares en Buenavista, Aguililla y la Costa, son parte de su derecho a la libertad de expresión y a su “sensación”.
“Yo creo que cada persona es libre de expresar lo que considere, lo que para ellos esté en su sensación, y bueno, nosotros estamos muy atentos, estamos permanentemente desplegados en todo el Estado para cualquier situación, cualquier circunstancia que se llegue a presentar. Hasta el momento no tenemos nosotros ningún reporte de esta situación, ni hemos en los diversos despliegues encontrado una situación de este tipo.”
No obstante, Ramírez Bedolla consideró que el estado debe estar “preparado para cualquier situación”.
A pregunta expresa, descartó la posibilidad que haya michoacanos desaparecidos en el Rancho Izaguirre y luego aclaro que es un tema que está en manos de la Fiscalía de Jalisco, mientras que en su caso -precisó-, le corresponde “Michoacán”.
“No, ese es un tema que está en manos de la Fiscalía de Jalisco. El Estado de Jalisco es un Estado distinto al Estado de Michoacán. Es un territorio políticamente y administrativamente distinto a nosotros.”
Ramírez Bedolla reconoció que mantiene comunicación con el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus Navarro, pero precisó que ha correspondido al mandatario informar al respecto y la Fiscalía General de la República atrajo la indagatoria, que primero estuvo a cargo de la Fiscalía de ese estado.