El presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró que defenderá ante los tribunales el derecho de su administración a poner “piso parejo” en la generación de energía limpia, por lo que la Comisión Federal de Electricidad y la Secretaría de Energía buscarán que se respete el “Acuerdo para garantizar la Eficiencia, Calidad, Confiabilidad, Continuidad y Seguridad del Sistema Eléctrico Nacional” que se decretó el 15 de mayo pasado.
Aclaró que con esto “no se suspende, no se cancela ningún contrato, no hay expropiaciones, no hay estatismo, no hay nacionalización de la Industria Eléctrica como lo hizo el presidente Adolfo López Mateos”, al asegurar que con esto lo que se busca “es que no haya corrupción”.
En la mañanera, se dijo respetuoso de la determinación de algunos Juzgados de Distrito que otorgaron la suspensión provisional solicitada por las empresas inconformes y señaló que con el acuerdo se tiene como objetivo “no pagar sobreprecios por la energía eléctrica, ya que esto significa que los consumidores tengan que pagar más por el consumo de luz”.
López Obrador, aseguró que en el fondo de la controversia se encuentra “la corrupción, el saqueo y el influyentismo que se mantuvo durante dos sexenios en la energía eléctrica.
“Se entregaron contratos leoninos que afectan al pueblo de México, a la economía popular, porque por el influyentismo, se pactó por componendas entre empresas particulares y funcionarios públicos la compra de energía eléctrica a precios elevadísimos, con subsidios”.
Explicó que con esto “se pretendía destruir a la Comisión Federal de Electricidad, cerrar las plantas y subutilizarlas, no permitirles que generaran energía para darle preferencia a las plantas del sector privado, sobre todo extranjero”.