El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, rechazó especular sobre el móvil de la explosión de un coche bomba en el municipio de Coahuayana, pero aseguró que ningún civil falleció en el hecho violento.
En la víspera, el Fiscal Carlos Torres Piña informó que tres de los fallecidos eran integrantes de la Policía Comunitaria, pero no se había identificado a los otros dos, sin embargo, el mandatario descartó que pudiera tratarse de algún vecino de la zona.
“Dentro de todo el impacto de este tema, este complejo, muy delicado, hay un dato que creo que es relevante, que no hubo víctimas civiles que lamentar. En el caso de los policías comunitarios y del tema de los elementos, se está atendiendo la situación, se está dando puntual seguimiento desde el día sábado, se actuó de manera inmediata”.
Ramírez Bedolla rechazó especular sobre el posible origen o móvil del ataque y pidió esperar al informe de la Fiscalía General de la República, que ahora es la responsable de la investigación.
“Sería especular, es una especulación en sí mismo, lo que informe la FGR, ayer hubo una información muy precisa del secretario de gobierno de Michoacán y del fiscal respecto a indicios, datos que tenemos, se informó con mucha precisión, hay equipos de peritos, tanto de la FGR, de la Guardia Civil del Estado, de nuestro equipo antiexplosivos de la fiscalía, y será la FGR quien dé los avances”.
Aseguró que la atención a la zona fue prácticamente inmediata y que a las pocas horas arribaron 5 helicópteros de la Marina Armada y dos del gobierno estatal para brindar apoyo a los afectados por la explosión.



