A casi dos meses de que se abrió a la circulación el puente de la avenida Ocampo, que costó alrededor de 6 millones de pesos a los morelianos, la vialidad no termina por convencer a los vecinos, quienes ya detectaron dificultades para cruzar en automóvil.
Uno de los principales problemas es la falta de visibilidad al cruzar por la pendiente, expuso José Arturo Reyes González.
Julio Víctor Reyes Cortés, quien vive a unos pasos del puente, explicó que aumentó la movilidad en esta zona, que ayuda a disminuir el tráfico en avenidas como la Francisco J. Múgica o Cuautla.
Expuso que al principio, pedían solo la modernización del puente peatonal, pero les trajeron una torre.
Aunque cumple con su fin, el puente está mal hecho, así lo expresó el mecánico Martín Rodríguez Martínez.
Otra problemática que registra el puente de Ocampo es que algunas personas instalaron una casa de cartón abajo, donde presumen que se ingieren drogas, lo que expone a los vecinos y a los transeúntes.