El 2 de febrero es una de las fechas más esperadas de los mexicanos porque se pagan los tamales por el al Día de la Candelaria, aunque el origen, parte de la religión católica y los prehispánicos, ya que representa la purificación de la Virgen María, 40 días después del parto, y la presentación del niño Jesús en la iglesia.
Este año, los tamales de salsa verde, mole y rajas serán degustados de una manera distinta, derivado de la pandemia del Covid-19, ya que la mayoría de las morelianos optó por quedarse en casa y celebrar solo con el núcleo familiar.
Tal es el caso de Concepción Ávalos, quien con su esposo y sus dos hijas no dejarán de lado esta tradición religiosa.
“Para nosotros que tenemos una tradición familiar y religiosa, es muy importante porque nos recuerda que después del nacimiento de Jesús, llegan a presentarlo. Vamos a celebrar únicamente con mis hijas y mi esposo, vamos a cenar atolito y tamales, este día antes lo hacíamos con toda la familia, hermanos, sobrinos y hoy nada más lo haremos nosotros”.
En medio de una emergencia sanitaria compleja que aqueja a todos los mexicanos, Jonathan, no ha perdido los ánimos y este 2 de febrero, para él y su familia es un día que les representa alegría y unión y la oportunidad para valorar y disfrutar a nuestros seres queridos.
“Representa alegría, unión y tradiciones y vamos a desayunar con nuestros hijos y venimos a comprar unos tamales para festejar, en familia, encerrados nosotros nada más”.
Para evitar que la celebración del Día de la Candelaria provoque más contagios, Bertha Avilés ha decidido respetar las medidas sanitarias y este 2021 no visitará la iglesia para bendecir al niño Dios, como cada año lo hacía.
“Cuando estaba normalizado todo en el templo si venimos a traer el niño Dios y hacer la visita pero ahorita como estamos en pandemia, nos estamos cuidando mucho, entonces la reunión va a ser en casa, nada más en familia”.
Aunque muchos lamentaron que las condiciones de salud no les permita celebrar en grande, este día, los tamales no dejarán de ser los protagonistas de las mesas mexicanas.