Entre “infinidad” de observaciones que se han hecho a la Secretaría de Educación de Michoacán, su titular, Yarabí Ávila González destacó a cerca de 300 docentes muertos y un número indeterminado de maestros que radican en Estados Unidos de Norteamérica, que eran parte de la nómina estatal.
Señaló que en la revisión administrativa que se lleva a cabo como parte del proceso de “federalización” de la nómina, se identificaron “muchos pagos que se hacen de manera irregular”.
En el caso de los fallecidos explicó que se identificaron alrededor de 292 maestros que ya murieron por lo que fueron dados de baja.
Ante esta situación, señaló que ya se firmó un convenio con el Registro Civil, para que les notifique cuando existe un fallecimiento y tener así “información de primera mano”.