Morelia, Mich,.– El crimen organizado mexicano ha extendido su influencia hasta Colombia, donde actualmente mantiene operaciones en regiones como Nariño, en la frontera con Ecuador, alertó el embajador de ese país en México, Carlos Fernando García Manosalva. Estas redes transnacionales no solo generan violencia, sino que han comenzado a reclutar exmilitares colombianos para operar en estados mexicanos como Michoacán.
De acuerdo con el diplomático, este fenómeno ha sido detectado de forma puntual solo en Michoacán, donde recientemente se documentó la captura de 11 exsoldados colombianos que presuntamente fueron contratados para participar en actividades criminales, incluso relacionadas con explosivos y enfrentamientos armados.
“En Colombia tenemos ya influencia mexicana en muchas regiones del país a partir de los vínculos mafiosos que existen entre organizaciones delictivas de ambos países”, reconoció García Manosalva.
“Lo más reciente ha sido fundamentalmente con la participación de 11 ex soldados colombianos que fueron capturados y que están en manos de las autoridades; esto ha ocurrido únicamente en Michoacán”, añadió.
El embajador explicó que muchos de estos colombianos ingresan a México bajo engaños, con la promesa de realizar labores de seguridad privada, pero luego son integrados a economías ilegales. Aunque no existe una estadística precisa, el fenómeno suele detectarse hasta que los involucrados son detenidos.
Además, subrayó que la ausencia de derechos, educación y oportunidades en América Latina crea condiciones propicias para que jóvenes y exmilitares opten por estas “empresas ilegales” en busca de ingresos, aunque con altos riesgos de violencia, cárcel o muerte.