El Comité de Familiares de Personas Detenidas, Desaparecidas en México (COFADDEM Alzando Voces), denunció la indiferencia de las autoridades estatales, el gobernador, las instituciones que representan a los poderes Ejecutivo y Legislativo, así como la Fiscalía General del Estado (FGE), para atender su petición de audiencia hecha desde el 2022.
Dora Jaimes, representante de la agrupación civil, señaló que acompañan 10 casos de personas desaparecidas de 32 casos registrados, de los cuales hay nula respuesta.
Hasta el momento no existe una sola investigación concluida, ni una sola persona encontrada, al menos para COFADDEM, las mujeres son de larga “data”, de casos de 10 o 15 años, muchas de ellas han dejado de ir a las marchas no porque disminuyeron los casos, sino porque han enfermado.
“Es un tema bien complicado y doloroso, si se fijan que ha disminuido el número de familias que están, pero su lucha está, pero por temas de salud, que nos lleva a qué no estén presentes, pero vean a la compañera Marielena, pero estamos conscientes que la edad avanza, y tener un familiar desaparecido, somatiza la enfermedad”, añadió.
La agrupación COFADDEM “Alzando Voces” partió con un grupo de madres del Estadio Venustiano Carranza, en donde destacaron que la labor de investigación y búsqueda las hacen ellas, y no las autoridades.
También expresaron que en los límites con Jalisco y Colima, aumentaron los casos de desaparecidos.
COFADDEM realizó un pronunciamiento en la 21 Zona Militar, y ahí denunciaron que en la mayoría de los casos de personas desparecidas hay la intervención del Estado, las corporaciones policiales y el Ejército Mexicano.
Durante la protesta que partió del Venustiano Carranza, se escucharon consignas como “en luchas cómo estas habrá muchos caídos, por eso reclamamos a los desaparecidos”; como cada 10 de mayo, refieren “este día no es de fiesta, es de lucha y protesta”.
Una madre, cuyo hijo desapareció en Zitácuaro el 28 de enero del 2023, expresó su dolor, salió a la tienda y ya no regresó, “se lo llevaron cumple 22 el 15 de junio, las autoridades no me dicen nada, no hay respuesta, no voy a la fiscalía solo me dieron un teléfono para estarme comunicando”, describió bajo el miedo, ya que tiene más hijos y teme se repita la historia.
El caso de Daniel es uno de los más añejos. Su madre Rebeca Alfaro no falta cada año a la protesta. Daniel acudió a una localidad de Morelia, en Betania, localidad a dónde fue enviado por el Consejo Nacional de Fomento Educativo (CONAFE), hace 11 años, ahí desapareció, desde entonces no hay respuesta, “quiero una verdad nada mas, dónde está mi hijo, que pasó con mi hijo”, refiere al repetir y recordar ese momento donde la lucha empezó.
“Quisiera que de verdad lo buscarán que le hicieron, no lo sé, algo le hicieron, está en búsqueda, seguimos buscando, estamos yendo a buscarlo, no hay respuesta”, concluyó.