Diciembre inició con una manifestación de trabajadores de la educación del grupo disidente Poder de Base, quienes se reunieron en Casa de Gobierno y marcharon hasta Palacio de Gobierno para exigir nuevos pagos y pendientes del gobierno estatal. El dirigente sindical, Benjamín Hernández Gutiérrez, definió que siguen los motivos para salir a las calles, ya que tienen información de una nueva inestabilidad salarial a principios del 2022 por la falta de la federalización de la nómina.
A ello, sumó la exigencia para que a administración bedollista pague 62 millones de pesos a más de 300 personas que laboran en 3 programas sindicales y que no han recibido salarios desde 2 hace dos años, pese a que el recurso está presupuestado y desconocen qué destino tuvo dentro de la Secretaría de Educación Estatal (SEE).
Profesores, trabajadores de apoyo y administrativos, inundaron el libramiento de Morelia, cerrando la vialidad hasta la avenida Juárez con consignas contra sus “enemigos oscuros de la CNTE” y la falta de resolución a sus demandas por las autoridades, mientras los conductores capitalinos buscaban vías alternas para salir de los embotellamientos provocados a su paso.
Hernández Gutiérrez recordó a la Secretaria de Educación, Yarabí Ávila González, que ellos salen a las calles al verse obligados por la falta de respuestas, por lo que si sancionan a los trabajadores de la educación de esta fracción sindical, las demandas aumentarán.
“Reportero: ¿Aceptarían el descuento?
Benjamín Hernández: Obviamente que no, solamente sería acumular una demanda más y creo que lo nuestro es justo, no estamos reclamando lo que no nos compete. (…) La no resolución de la problemática hace que los trabajadores vuelvan a salir a la calle, si hubiera respuestas desde la primera semana de octubre y se sentaran con nosotros no estaríamos en esta condición, no es por gusto”
Sin contratiempos, los manifestantes llegaron alrededor de las 14:00 horas al primer cuadro de la capital michoacana donde realizaron un mitin frente a Palacio de Gobierno.