El secretario de Gobierno, Carlos Torres Piña descartó reconocer un “derroche” de recursos públicos en el Tercer Informe del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, que se realizó en el Estadio Morelos, aunque calculó que se gastaron alrededor de 4 millones de pesos, en las sillas y el piso que se colocó sobre el pasto de la cancha.
Explicó que otro monto es el que destinó el Congreso del estado para habilitar el recinto oficial, pero no precisó alguna cifra.
Luego de que asistentes reconocieron que ediles e instituciones educativas pagaron el traslado de vecinos, estudiantes y docentes, el funcionario estatal rechazó que el gobierno de Michaocán haya paticipado en ese tipo de acciones.
Sin embargo, sí señaló que muchas de las personas que acudieron se trasladaron desde el interior del estado, por lo que precisó que algunos alcaldes y diputados “apoyaron” con la movilización.
Torres Piña rechazó que hayan existido presiones hacia empleados o burócratas para que asisteran y se tomaran una foto “selfie” como prueba de su asistencia.
Sin recordar el gasto que se hizo, precisó que la actividad que se realizó en la Plaza Valladolid de Morelia, luego de que el gobernador entregó su primer informe al Congreso de Michoacán, fue un evento político en el que Ramírez Bedolla dio un mensaje con este motivo, en el que solo se pagó el equipo de audio y templete.