A la marcha del próximo 27 de noviembre, en donde el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador saldrá a las calles de la ciudad de México para impulsar su reforma electoral, yo le llamaría o le pondría como etiqueta: La Marcha del Rey Desnudo.
Ya lo sabe, por la semejanza con aquella fábula: El nuevo traje del emperador, también conocida como El Rey Desnudo.
El mensaje implícito de este cuento es muy simple: “solo porque la gente crea que algo es verdad, no significa que lo sea”.
Si no ha leído la fábula, aquí le dejo la liga:
http://www.jdiezarnal.com/cosasmenuelreydesnudo.html
Bien, y le llamaría así a la marcha de AMLO para generar un mayor efecto e impacto desde mi perspectiva de neurocomunicación. Mis 4 argumentos son simples:
- El cerebro está destinado a eliminar constantemente la información irrelevante y poner el énfasis y la atención adecuados en la información entrante que se considere relevante. A esto se le llama inhibición latente. Lo explico de manera simple: si la oposición sale a decir lo de siempre, lo que ya hemos escuchado o leído, entonces nuestro cerebro lo eliminará. Pero si lo que desean es que el mensaje opositor sea mejor recordado, entonces deberían etiquetar la marcha con un nombre o un concepto que resulte muy pegajoso para el cerebro humano.
- Una fábula o un cuento, tienen mucho más poder de atracción que la comunicación ordinaria.
- Esta fábula es reconocida en diversos países, por lo tanto, el mensaje implícito en la etiqueta puesta facilitaría que en otros lugares del mundo vieran a López Obrador como un Rey que se auto-engaña y pretende engañar.
- Se trata de crear un almacén asociativo con este tipo de etiqueta. Ese es un trabajo fino que se puede hacer con neurocomunicación y con neuromarketing, y que sí está al alcance de los opositores a través de especialistas.
¿Y cómo se podría interpretar el mensaje de la fábula con la marcha de AMLO de manera muy simple? Así: “No porque López Obrador y su gente digan que están gobernando bien, tiene que ser verdad”.
Es más… caminan desnudos, y muchos lo saben.
*El autor es consultor, tiene estudios de doctorado en Política, de maestría en Comunicación, de maestría en Neuromarketing, de maestría en Ciencia Política y de licenciatura en Derecho.