Morelia fue testigo de uno de los eventos religiosos más importantes de la Semana Santa. Miles de ciudadanas y ciudadanos se dieron cita en el Centro Histórico para presenciar la escenificación de la Última Cena y otros pasajes con la participación de 100 personas.
En el preludio, el arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos compartió que, a través de las escenificaciones, se busca ayudar a toda la comunidad, católicos y no católicos, a vivir de manera personal la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
“Queremos a través de las escenificaciones ayudar a que toda la comunidad, a los católicos y no católicos, para que podamos celebrar y vivir lo propio de lo que nosotros llamamos el Triduo Sacro”.
Desde un escenario preparado para miles de espectadores, apareció el Sanedrín en un juicio para cuestionar y castigar a Jesús por predicar la palabra de Dios, dando paso al pago a Judas Iscariote con monedas de oro para entregar a su maestro.



En un cambio ágil de la atmósfera, el público presenció la aparición de Jesús en la Última Cena junto a sus apóstoles. En el clímax de la escenificación, Jesucristo, interpretado por Óscar Alfredo Mejía, de 30 años de edad, entregó el pan mojado a quien lo traicionaría.



Con una actuación ágil, los participantes de la puesta en escena mantuvieron cautivas a miles de personas presentes. El evento religioso culminó con la Oración en el Monte de Los Olivos, la traición consumada de Judas y la negación de Pedro.