En México, la elevada tasa de letalidad por la COVID-19 está fuertemente asociada a la obesidad, diabetes e hipertensión (Carrillo-Vega, Salinas-Escudero, García-Peña, Gutiérrez-Robledo, & Parra-Rodríguez, 2021).

De estas enfermedades, los medios de comunicación dicen muy poco o prácticamente casi nada, cuando se refieren a las razones por las cuales el número de fallecimientos a causa de esta enfermedad ha sido abrumador y por supuesto, lamentable.

La obesidad, la diabetes e hipertensión, son tres enfermedades que han impactado a la salud pública de nuestro país desde hace varias décadas y en México, los datos epidemiológicos actuales de estas enfermedades son aún más desoladores que los de la propia COVID-19.

Para poner en contexto lo anterior, y con base en la última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT), llevada a cabo en 2020 a cargo del Instituto Nacional de Salud Pública, 8 de cada 10 mujeres tiene sobrepeso u obesidad, mientras que, para los hombres, 7 de cada 10 padece ambas condiciones. En cuanto a las cifras de hipertensión, la misma encuesta encontró que 3 de cada 10 mexicanos mayores de 20 años padece hipertensión (Instituto Nacional de Salud Pública, 2021).

Por otro lado, la diabetes es sin lugar a duda una de las enfermedades más preocupantes a nivel mundial, pues con base en el reporte del 2019 por parte de la Federación Internacional de Diabetes (IFD, por sus siglas en inglés), México ocupaba el sexto lugar en el mundo, con un total de 12.5 millones de personas afectadas con esta enfermedad (International Diabetes Federation, 2019).

Pero ¿qué tienen en común estas tres enfermedades y por qué han sido un factor de riesgo importante para morir por la COVID-19?

La respuesta está en la fuerte inflamación que le causan a nuestros órganos a nivel celular, misma que no podemos ver ni sentir, pero que avanza e incrementa de forma paralela con cualquiera de estas tres enfermedades.

Este tipo de inflamación va deteriorando poco a poco a nuestros órganos, de tal forma que, cuando tenemos una enfermedad grave como la COVID-19, el efecto inflamatorio se vuelve mucho más agresivo, pues aumenta la respuesta de nuestras defensas, convirtiéndose así en algo negativo para los órganos vitales, como los pulmones, riñones, corazón y cerebro, provocando lo que se conoce como falla multiorgánica, cuyo desenlace es la muerte.

Por eso es muy importante que, si usted padece cualquiera de estas enfermedades o bien, si vive con alguna persona que se encuentre en estas condiciones, debe extremar las medidas precautorias para evitar desenlaces fatales.

Muchas gracias por su tiempo, nos vemos en la próxima.

Referencias

Carrillo-Vega, M., Salinas-Escudero, G., García-Peña, C., Gutiérrez-Robledo, L., & Parra-Rodríguez, L. (2021). Early estimation of the risk factors for hospitalization and mortality by COVID-19 in Mexico. PLOS ONE, 1 – 11. doi:10.1371/journal.pone.0238905

Instituto Nacional de Salud Pública. (2021). Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2020 sobre COVID-19. Ciudad de México: Instituto Nacional de Salud Pública .

International Diabetes Federation. (2019). Atlas de la Diabetes de la IFD. Brucelas : International Diabetes Federation.