El “éxito” financiero de Michoacán, depende en exceso de la aportación de recursos extraordinarios de la federación, por lo que la propuesta del Presupuesto 2023 para Michoacán, refleja un problema de pasivos, principalmente en el sistema educativo estatal, reconoció el Coordinador de Proyectos Estratégicos del Colegio de Economistas del Estado de Michoacán, Heliodoro Gil Corona.
El especialista en materia económica, refirió que el problema de fondo de las finanzas públicas del estado realmente no ha sido resuelto, ya que su techo financiero ha dependido en gran parte de la gestión de recursos hacia el gobierno federal, lo que solo significa dijo, darle un “mejoralito” a la fiebre que tiene Michoacán en este sentido.
“El problema de fondo de las finanzas públicas de Michoacán no se ha resuelto, ¿por qué? porque su techo financiero depende de la gestión institucional entre el gobierno del estado y el gobierno federal, no está definido presupuestariamente para decir que ya no tenemos bronca. Cuando uno revisa el presupuesto del estado, aparece que en el fondo sigue teniendo implícitamente un problema de pasivos presupuestarios”.
Recordó además que este 2022, el estado tuvo una fuente de ingresos fundamental como el reemplacamiento, recursos que el próximo año no tendrá, por lo que consideró los ingresos propios no serán tan fuertes y seguirán existiendo “hoyos” financieros en distintas dependencias, lo que reflejará la incapacidad financiera del estado.
En lo que respecta a la deuda que arrastra Michoacán, dijo que por más “moño” que le pongan, seguirá siendo un tema de presión, ya que ello, dependerá de las condiciones financieras del país, y en lugar de utilizar la derrama económica del estado para inversiones, se tiene que destinar al pago del servicio de la deuda que el próximo año dijo, podría rondar los 2 mil 500 millones de pesos.
En lo que respecta al esquema de inversión que plantea el estado con el Programa de Obras Multianuales, consideró no es malo, sin embargo, bajo las condiciones de deuda que arrastra el estado, el traer dinero del futuro al presente, indudablemente, se convertirá en pasivos comprometidos.