Ayer los gobernadores de Morelos, Cuauhtémoc Blanco y de Veracruz, Cuitláhuac García, dijeron que estaban dispuestos a que se realizara una investigación que los deslindara de una relación con miembros del crimen organizado.
Me da gusto que existan las ganas de cooperar y desterrar las sombras de sospecha que cubren sus mandatos; pero que no sea a medias. Sabemos que el sistema de justicia mexicano adolece de muchas cosas, y deja la mayoría de los casos en total impunidad.
Así que yo difiero de lo que dijo el Presidente Andrés Manuel López Obrador, sí existe la corrupción en México, sí existe la impunidad, y esto pasa porque las consecuencias son muy baratas, y las ganancias son muchas.
Además difiero de la falsa defensa de la soberanía. Imaginen que entran a su casa a robar, te das cuenta y sabes que no puedes hacer nada, que te tienen sometido, pero tienes la opotunidad de tomar el teléfono y marcar al vecino, que te ayude, pero decides no marcar, porque “nadie se mete a mi casa”.
No podemos hablar de soberanía con pueblos sometidos a la violencia, al terror y al crimen; cuando las autoridades responden a los grupos delincuenciales, y son ellos los que mandan en las comunidades.
¿A cuál soberanía quiere responder el presidente? ¿A la de la soberbia y orgullo? o quiere decir que nadie se mete con nuestros muertos, nadie se mete con nuestra sangre, nadie toca nuestros caminos secuestrados, que nadie toque a los cuerpos tirados.
Entonces tenemos una oportunidad, así como le sugerí a Donald Trump, en su momento, declarar como terroristas a los cárteles, hoy le pido a joe Biden, presidente de Estados Unidos, que investigue, que revise lo que está pasando acá, que inauguremos el término Seguridad Binacional.
No sólo se trata de desarrollo, se trata de garantizar la vida de miles de mexicanos. Ya no podemos quedarnos como testigos mudos de lo que pasa, se debe levantar la voz en la orquesta de las naciones, y aceptar que necesitamos ayuda.
Lo pido porque me dolieron mis familiares masacrados, pero me duele también darme cuenta que la situación no es diferente, que hoy hay miles de personas expuestas y vulnerables. O le pregunto a López Obrador, se atrevería ir a Reynosa, o a Celaya, o a cualquiera de estas ciudades y preguntarles ¿Quisieras que Estados Unidos nos ayudara a darte seguridad? Use las consultas qe tanto le gustan, y le aseguro que nadie respondería en contra.
No hablo de intervención, hablo de cooperación, hablo de realmente ser vecinos. No existen casuas ajenas, y como he insistido, a problemas compartidos, soluciones conjuntas.
A los gobernadores les recuerdo que se deben a sus pueblos, que a quien deben defender es a ellos. Que se quiten cuaqluier camiseta poítica, y que nos vayamos a Estados Unidos a relatar nuestras situaciones, que pidamos invstigaciones reales y que vayan al fondo, ahí sí podríamos avanzar.
Les pregunto, Cuahtémoc, Cuitláhuac ¿Vamos a Washington?