La negativa a percibir su salario vía tarjeta bancaria y la exigencia para que se contraten nuevos docentes que impartan clases en las comunidades al interior de Michoacán, provocó que los trabajadores de la educación del grupo disidente Poder de Base tomaran este jueves las instituciones bancarias en los municipios de Morelia, Uruapan, Zamora, Lázaro Cárdenas, La Piedad y Apatzingán.
Desde la toma de la sucursal bancaria Santander de la avenida Madero, ubicada en el primer cuadro de la capital, la secretaria de Organización del Sector VII, Yunuén Ávila, detalló que la protesta busca impedir la tarjetización forzada, bajo el retraso de salario, que deja como única alternativa pagar mediante tarjeta.
Además, otra inconformidad, es la leyenda “No negociable” que se colocó en los cheques, lo que impide a los trabajadores de la educación cambiarlos por efectivo en las comunidades rurales sin acudir a un banco.