Con seguro catastrófico se defraudó con alrededor de 130 mdp a campesinos de Michoacán

Con seguro catastrófico se defraudó con alrededor de 130 mdp a campesinos de Michoacán

La administración anterior habría defraudado con cerca de 130 millones de pesos a productores agrícolas afectados por fenómenos climáticos durante al menos 3 años, a través de los denominados “seguros catastróficos” a los que el gobierno estatal destinó cerca de 70 millones de pesos, mientras que los campesinos recibían únicamente 1 mil 200 pesos por hectárea.

El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de Michoacán (SADER), Cuauhtémoc Ramírez Romero, explicó que pese a que el costo promedio por hectárea es de 25 mil pesos, se liquidaba una mínima parte a los afectados, ya que el estado cobraba la totalidad como beneficiario preferente.

“Había un manejo totalmente deshonesto, porque hubo la liquidación de la aseguradora de las pérdidas que se dieron y una parte importante no la pagaron a los productores, la aseguradora le pagó al gobierno del estado, como beneficiario preferente, se puso el gobierno. Pagaron 250 millones de pesos, se quedaron con 118 millones, no se los dieron a los campesinos”.

Ramírez Romero aseguró que la administración Silvanista operó el manejo del “seguro fraudulento” a través de una empresa denominada “PROASEMEX”, por lo que se turnó el caso a la Contraloría del estado para que se haga la investigación correspondiente.

“El seguro catastrófico que se daba era una indemnización a los productores de mil pesos por hectárea, de un costo promedio en maíz de 25 mil pesos y se ejercían 60-70 millones de pesos en el seguro catastrófico y resultaba que los productores recibían mil pesos y era un negocio para la aseguradora”.

Explicó que para este año, la dependencia no contempla un monto específico para apoyo a los productores, pero aseguró que en caso de presentarse una contingencia se buscaría un esquema de gestión de apoyos.

El titular de SADER, informó que ahora se promueven los fondos de autoseguro, que funcionan mediante la organización y recursos de los propios productores.

“Lo que estamos haciendo son los fondos de autoseguro, que es el esfuerzo propio de organización de los productores y segundo, hacer el esfuerzo de cubrir su seguro agrícola y las pérdidas son menores generalmente y el recuso les queda a ellos con un ahorro para que crezca en superficie y les salga más barato el aseguramiento”.