En decenas de autobuses, urbanos y combis, fueron “trasladadas” miles de personas que acudieron al Estadio Morelos este sábado 21 de septiembre a presenciar la entrega del tercer informe del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla.
Algunos acudieron financiados por los ayuntamientos de Angamacutiro y Aquila, otros más con recursos públicos de la Universidad de la Ciénega de Chapala, otros encabezados por dirigentes con los que confían encontrar apoyos para mejorar sus comunidades e incluso algunos que desconocían a quien verían en el lugar.
Las puertas del Colosio del Quinceo se abrieron desde antes de las 7 de la mañana para recibir a los grupos de asistentes y permitir la entrada de los autobuses en el estacionamiento.
Un total de 10 camiones llegaron desde el municipio de Angamacutiro, financiados por el ayuntamiento, que utilizó sus vehículos y pagó la gasolina, según lo reconoció ahí mismo el alcalde Hermes Pacheco Bribiesca, quien los recibió en el lugar.
“Venimos unas 450 personas, venimos por agradecimiento al gobernador Alfredo Ramírez. Tengo mis autobuses del transporte escolar gratuito que damos el servicio gratuito, nos costó el combustible, un costo de unos 5 mil-8 mil. “.
También en grupo llegaron 160 estudiantes, trabajadores y docentes de la Universidad de la Ciénega, con sede en Jiquilpan y Sahuayo, a quienes la propia institución financió el transporte y la alimentación, según lo señalado por el docente de la compañía folclórica de la Universidad, Jorge Lozano.
“Tenemos un estimado de 160 personas, con alumnos, administrativos y académicos”, precisó el diseñador gráfico, Alvaro paredes.
Los asistentes revelaron que salieron de sus lugares de origen desde las 4:00 o 5:00 de la mañana para llegar a tiempo, aunque los 5 camiones que se trasladaron desde La Placita, municipio de Aquila, salieron la víspera a las 7:30 de la noche para llegar en la madrugada.
Carlos Rosales González, aseguró que el pago de viáticos corrió a cargo de la presidencia municipal.
“Ahí yo creo que nuestro presidente nos apoyó para los viáticos y para echar un taco, ya fuimos a comer menudo y a almorzar, comimos pan y lonches. Teníamos ganas de estar en este evento.”
Como parte de quienes viajaron en un grupo de 10 camiones provenientes de Maravatío, Mireya señaló que “un encargado del partido” les dijo que acudirían a un mítin, aunque no les dijo de quien. Aseguró que su intención es gestionar obras para su localidad.
“Nos trajeron a un mitin, pero no nos comentaron bien un encargado de parte del partido; no nos van a dar nada, el compromiso de apoyarnos en la colonia, en las calles, hay mucho beneficio que tenemos para que nos apoyen
Sin embargo, otros dijeron desconocer a qué se trasladaron hasta Morelia.
“La verdad yo no sé, solo me dijeron que los acompañara pero la verdad no sé”.
María Guadalupe, aseguró que se trasladó en taxi desde la colonia “Ignacio” de Morelia, ya que una persona le pidió que la acompañara aunque no sabía a qué acudiría ni qué beneficio podría dejarle.
“Nos tocó venirnos en un taxi porque ni camión nos mandaron. Una señora no sé, yo nada más vengo, me dijo que la acompañara, que nos ayuden para arreglar la carretera”.
Los asistentes no lograron llenar el Estadio Morelos pese a que se colocaron lonas en la parte de gradas atrás del escenario; al iniciar la sesión solemne y el informe del gobernador solo la parte de palcos, plateas y preferentes lucía con mayor asistencia, el resto estaba semivacío.
En pleno discurso del gobernador, policías auxiliares comenzaron a distribuir algunos recuerdos entre los asistentes, lo que provocó inquietud y distracción.
Sin embargo, apenas terminó el gobernador y comenzaron los posicionamientos de las fracciones parlamentarias, los asistentes comenzaron a salir sin ningún recato y al finalizar la sesión, el estadio lucía prácticamente vacío.
