A punto de cumplirse 2 años y un mes del asesinato de Jessica González Villaseñor, se conocieron las imágenes que captaron al menos 3 cámaras de seguridad del Fraccionamiento Bosque Monarca el 21 de septiembre del 2020, la tarde en que la joven se encontró con Diego Urik N., imputado como responsable de su feminicidio.
El perito en análisis de video Walter Ulises N., rindió su testimonio y expuso las grabaciones de 4 discos y una memoria USB durante la audiencia de juicio oral a cargo del juez Ariel Montoya Romero, y en la que se sumaron otros 2 abogados a la defensa del presunto feminicida, integrada ya por 12 juristas.
Sin que en ningún momento se confirmara la identidad de las personas que se captan en las imágenes, el perito inició la proyección con la grabación que se hizo a las 15:01:54 horas del 21 de septiembre, cuando del fraccionamiento Monarca sale un vehículo Polo, Gris Oscuro, que porta las placas que identifican al vehículo de Diego Urik, que maneja un hombre con una chamarra azul oscuro y franjas blancas en los lados.
A las 16:44 horas, ingresa el mismo vehículo, manejado por la misma persona, pero que ahora viste un camisa sin mangas; con una acompañante mujer que no logra ser identificada pero que porta una blusa color camel.
Tras conocer esta imagen, la audiencia tuvo que ser suspendida durante cerca de 15 minutos, debido a que el imputado manifestó tener malestares estomacales. El juez informó después, que no había desayunado.
“No había comido, eso le provocó reflujo y le dieron alimento, ya luego se ocuparan de tratarlo”, expuso el juzgador al reanudar la audiencia.
A las 16:48, otra cámara capta a la pareja cuando baja frente a un inmueble, que se presume la vivienda particular de Diego; salen del lugar y abordan de nuevo el vehículo a las 17:38 horas.
El Polo Gris propiedad de Diego vuelve a aparecer ante las cámaras de seguridad a las 18:43 horas; tras estacionarse abre la cajuela y las puertas de atrás del vehículo.
Unos minutos después, a las 18:47 horas, se estaciona un vehículo Renault atrás del Polo, descienden 2 personas; quien parece ser Diego sale de la casa, entre los 3 revisan el vehículo, parecen nerviosos y revisan con insistencia la parte de atrás, se asoman, se agarran la cabeza como desesperados.
A las 19:24 horas, las 3 personas abordan el Polo y se retiran del lugar; 20 minutos después regresan, se estacionan e ingresan a la vivienda.
A las 19:59 horas, 1 persona sale del domicilio y se retira en un auto Reanult y una hora después, otra arriba en un automóvil Sedan e ingresa a la vivienda.
A las 22:21 horas, 3 personas abordan una camioneta y se retiran, pero 30 minutos después regresan y solo 2 de sus ocupantes descienden e ingresan al domicilio.
Al minuto 56 del 22 de septiembre, una mujer llega al domicilio de Diego, se estaciona, revisa el Polo Gris y baja una bolsa negra, al parecer de basura y se va; regresa a las 2 de la mañana, y desciende del vehículo con otra persona e ingresan a la vivienda.
Por la mañana, la cámara capta la salida del Polo Gris cerca de las 11;00 horas pero conducido por una mujer, que no es identificada como Jessica.
En ningún momento, las grabaciones captan algún momento en que la joven maestra haya abandonado el Fraccionamiento.
El perito expuso enseguida las grabaciones de las Cámaras de Seguridad del autolavado Elite, localizado sobre la calle J. J. Tablada. En las imágenes se aprecia el momento en que una mujer lo entrega a los encargados y se retira.
Cerca de las 14:09 horas, se estaciona un BMW blanco, del que descienden 2 hombres, uno de ellos no logra identificarse, pero el otro es Diego, quien revisa meticulosamente la cajuela de su vehículo.
En la grabación incluso se aprecia que el joven mete la cabeza a la cajuela para verificar la condición en la que se encuentra.
Las grabaciones de 4 discos y una memoria USB fueron integradas como pruebas en el juicio, pese a la negativa de los defensores particulares y a las dificultades que enfrentó el experto, debido a las condiciones del reproductor que fue habilitado.
