El inédito asesinato de dos precandidatos este lunes en Maravatío, uno del Partido Acción Nacional (PAN), Armando Pérez Luna, y otro de Morena, Miguel Ángel Reyes Zavala, corrobora la amenaza que representa el crimen organizado al sistema democrático en el estado y al Estado mexicano como tal.
Así lo dijo Guillermo Valencia Reyes, líder del Partido de la Revolución Institucional (PRI) en Michoacán, quien comentó que la violencia política no solamente acecha a los aspirantes a algún cargo, sino también a los votantes, es decir, “a todos los que queremos vivir la plenitud nuestra democracia”.
Lamentó también que hasta ahora son cuatro los aspirantes del tricolor en la entidad (“cuatro estupendos perfiles”) que han renunciado a contender en las urnas el próximo domingo 2 de junio, tras haber recibido amenazas en sus respectivos territorios, uno de los cuales habría sido un candidato a reelegirse.
Por lo anterior, en lo sucesivo el PRI concentrará los registros de los candidatos en Morelia, y hará, a través de una empresa, un análisis de riesgo a cada uno de ellos, además de que solicitará protección especial al gobierno del estado para procurar la seguridad de los que puedan sentir amenazada su vida, señaló Valencia Reyes.