A partir del 15 de mayo, cerca de 5 mil 300 pensionados y jubilados del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en Michoacán, estarán en el padrón de beneficiarios y podrán acceder a la atención médica, con una inversión estatal anual de 117 millones de pesos.

Tras la firma de la operatividad del convenio que se había concretado en enero pasado entre el gobierno estatal y el ISSSTE, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, aseguró que su administración logró terminar con el saqueo de recursos públicos y con ello, se logró concretar este acuerdo que encontró resistencia de administraciones pasadas, porque había “mucha corrupción”.
“Esa era la perorata, que no había recursos y me lo preguntó el doctor Zenteno, “Alfredo ¿por qué no se firmaba este convenio, por qué no existían estos servicios si es simple el brindarlos? Y la negativa de gobiernos era que no había recursos, pues resulta que sí hay recursos, el tema es que era mucha corrupción, no hay recurso que alcance para tanta transa, aquí estamos cuidando cada peso, cada centavo”.
El director general del ISSSTE, Pedro Zenteno Santaella expuso que la tardanza en la firma del convenio fue exclusiva de otras administraciones, ya que el propio Ramírez Bedolla le aseguró que “los gobiernos anteriores no ponían en el centro al ser humano sino sus propios intereses personales”, para justificar su mala acción.
Señaló que el “elefante reumático” de la burocracia obligó a ir a “empujones y patadones” para hacer realidad el discurso y asegurar la atención a los 5 mil 300 docentes y sus familias, con lo que serán más de 20 mil personas las beneficiadas.
La secretaria de Educación, Gabriela Molina Aguilar reiteró que la administración estatal no tiene ya ningún adeudo con los docentes michoacanos y que el ciclo escolar se ha desarrollado sin incidentes.