Morelia, Michoacán– Ciudadanos, estudiantes y autoridades de instituciones educativas presentaron una denuncia formal ante diversas instancias gubernamentales por la ocupación ilegal y destrucción ambiental en el “Bosque de Eucaliptos”, un importante pulmón ecológico de la capital michoacana, localizado en Piedra del Indio.
La denuncia, fechada el 23 de marzo y dirigida al secretario de Medio Ambiente del Estado, al Ayuntamiento de Morelia y a la Procuraduría Ambiental del Estado, responsabiliza a un grupo identificado con la organización “Antorcha Campesina” de apropiarse ilegalmente de una zona forestal, donde han instalado casas de campaña, construcciones improvisadas de madera y han talado árboles de diversas especies, muchas de ellas endémicas.
Los denunciantes argumentan que estos actos constituyen una violación a la Ley Ambiental para el Desarrollo Sustentable del Estado de Michoacán, particularmente al Artículo 2°, que protege los ecosistemas forestales y áreas de valor ambiental.




Una vecina de la colonia Galeana, quien pidió el anonimato por temor a represalias, relató que los intentos de invasión comenzaron en marzo de 2025. En un primer momento, el Ayuntamiento intervino y desalojó al grupo, sin embargo, semanas después regresaron, presuntamente amparados por recomendaciones de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
“Dicen que Derechos Humanos los respalda, y con eso justifican su presencia. Han instalado casas de madera y se están expandiendo hacia el centro del bosque. Están talando árboles donde habitan aves, mariposas, incluso tecolotes. Hay especies endémicas como el pino michoacano, y las están destruyendo”, denunció la habitante.
Vecinos también acusan que durante las noches han observado vehículos oficiales, incluidos camiones presuntamente de la Comisión Federal de Electricidad, ingresando al área para proveer servicios de forma clandestina. “No parecen personas vulnerables. Llegan en camionetas de modelo reciente, con materiales de construcción. Sospechamos que hay apoyo de autoridades estatales”, señaló la denunciante.
La zona invadida colinda con instituciones educativas como la Escuela Normal de Educación Física, la Universidad Michoacana, el Instituto Politécnico Nacional y la UNAM, por lo que la comunidad estudiantil también ha manifestado su preocupación ante el riesgo ambiental y social que representa la ocupación del bosque.
Según estimaciones de los habitantes, al menos entre 4 y 5 hectáreas del área forestal ya han sido ocupadas, con riesgo de que la expansión continúe si no hay una intervención inmediata de las autoridades ambientales y de seguridad.
Hasta el momento, los denunciantes acusan una grave omisión de las autoridades locales y estatales, incluyendo a la Guardia Civil, la cual, aseguran, ha evitado intervenir debido a las recomendaciones de Derechos Humanos.
La comunidad exige acciones inmediatas para frenar el ecocidio, restaurar la zona afectada y deslindar responsabilidades legales a quienes resulten implicados.