Morelia, Mich.- El presbítero Gregorio López Gerónimo, mejor conocido como “el padre Goyo”, afirmó que en Tierra Caliente operan grupos paramilitares integrados principalmente por más de 300 colombianos, quienes son responsables de elaborar los artefactos para las minas terrestres y drones.
En entrevista, exigió al actual secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, actuar en esta zona e incluso se ofreció a ser colaborador en la estrategia de seguridad que se implemente en la región, luego de que en los últimos meses ha registrado una mayor cantidad de incidentes por las minas terrestres.
Agregó que la situación de inseguridad se agrava aún más con la presencia de paramilitares extranjeros, particularmente de Colombia, Haití, Venezuela e incluso Ucrania. Acusó que estos grupos son favorecidos por la corrupción local, ya que han logrado obtener documentos legales, como actas de nacimiento y residencias, facilitando su operación en territorio mexicano.
“También hay haitianos, hay venezolanos, hay hasta de ucranianos, el juez del registro civil del estado les acaba de otorgar actos de nacimiento. Actos de nacimiento, claro, presionado o bien pagado por la delincuencia para que trabajen legalmente, si te paran ya tienes tu IFE aunque hables como extranjero, pero tienes un ID, tienes una residencia eso es grave es un dato grave pero se acaban de emitir más de mil actas de nacimiento a través del registro”, denunció.
Describió que a esto se suma el uso de tecnología bélica avanzada por parte de los delincuentes, como minas antipersonales y drones, herramientas que son utilizadas en las zonas rurales para sembrar el miedo y el caos.
Ante este panorama, exigió la intervención urgente de las autoridades federales y la colaboración internacional. “Es necesario que venga el gobierno federal con toda la maquinaria del estado. La situación en esta región ya es insostenible”, afirman. Incluso se pide la intervención de organismos internacionales, como la ONU, para detener la violencia y restablecer la seguridad.
Aseguró que la región de Tierra Caliente se vive una crisis de seguridad sin precedentes, en la que la delincuencia organizada parece tener más poder que las mismas autoridades locales, por lo que consideró que la única salida viable, es un esfuerzo conjunto entre las fuerzas federales y la colaboración internacional, que permita devolver la paz a una de las zonas más afectadas por la violencia en México, dijo al sugerir la intervención de los cascos azules.