En un ambiente de luto y en penumbras, se llevó a cabo este Viernes Santo en la capital michoacana la edición número 48 de la Procesión del Silencio, en la cual participaron 19 cofradías de la ciudad.

Entre rezos, las imágenes religiosas y participantes se concentraron en la Calzada Fray Antonio de San Miguel, previo a iniciar la actividad.

En punto de las 7:00 de la tarde, el cortejo partió, pero los rayos de luz poco a poco se fueron consumiendo, hasta que solo la luz de las velas alumbró el recorrido.

En esta ocasión, destacó la presencia de 14 imágenes religiosas, que datan de finales del siglo XVl, lo que además de tener un valor espiritual, agrega a la actividad un valor histórico.

El recorrido como duelo por la muerte de Jesucristo en acompañamiento a la virgen María, transitó por la avenida Francisco I Madero, que fue iluminada solo por la luz de las velas de morelianos, visitantes y turistas.

Luego de cerca de una hora y media, la Virgen se la Soledad y la imagen de Jesucristo en el sepulcro arribaron el primer cuadro de la ciudad y ante la imponente Catedral de Morelia, el Arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, dio el pésame a la madre dolorosa.

Además, pidió a la Virgen por todos aquellos que están sumergidos en las drogas, así como por los que sufren los estragos de la inseguridad y hechos de violencia.

“Señora te pedimos por los hermanos heridos por la droga, por el alcoholismo, por la pobreza, por la ancianidad, por la enfermedad, por la migración, por las víctimas de las violencias y la inseguridad, el llanto de los que sufren la consecuencia de los secuestros y la corrupción, el llanto de los más damnificados por la crisis económica, el llanto de tantas mujeres viudas y solas como tú, el llanto de madres que, como tú, lloran al hijo perdido al hijo alejado”

Entre cantos y oraciones, la procesión siguió su recorrido, hasta llegar a la parroquia del Sagrario Metropolitano, mejor conocida como el templo de las Capuchinas, en donde cerca de las 10:30 de la noche la imagen de la virgen de la Soledad y el Cristo en el sepulcro fueron resguardadas.