Debido a los efectos del fenómeno climático conocido como “El Niño”, la presencia de las lluvias en Michoacán podría prolongarse hasta julio-agosto, advirtió el coordinador de Protección Civil del estado, Jorge Romero Alvarado quien confió en que la llegada de “La Niña” sea más benévola para la entidad.
Explicó que se espera que las lluvias lleguen con un retraso de al menos tres meses, al señalar que El Niño ha sido un fenómeno “muy cruel” y ha puesto a la entidad en una situación crítica.
“Esperamos y según los pronósticos, la naturaleza ya el día de hoy no tiene palabra de honor, estamos esperando que el fenómeno de El Niño cambie para después y sea más benévola con La Niña, y esperamos las primeras precipitaciones entre julio y agosto, donde ya empiece a caer agua, pero todo puede suceder”.
Desde octubre del 2023, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla firmó el decreto por el que declaró a Michoacán en emergencia por sequía y solicitó a la federación que decrete a la entidad en zona de desastre hídrico, luego de que registró en julio el mes con la temperatura más alta en la historia y en septiembre el menor nivel de lluvia en 70 años.
Incluso anticipó que se consideraba implementar una acción radical: el bombardeo de nubes en una tercera parte del estado para forzar las lluvias, pero Romero Alvarado aclaró que no se ha implementado.
“Como tal no, esto lo tiene que ver en su categoría CONAGUA”.
De acuerdo al reporte oficial que se proporcionó entonces, 98% de los municipios del estado se encuentran en condiciones de sequía.