Pese a que en Michoacán solo un 20 por ciento de la producción de 500 mil hectáreas de maíz es criollo, su existencia aún no está amenazada, así lo consideró el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), Cuauhtémoc Ramírez Romero, al informar que en la Meseta Purépecha prevalece este cultivo.
Asimismo, informó que esto corresponde a 100 mil toneladas del maíz nativo o autóctono. “Se producen alrededor de 100 mil hectáreas de 500 mil, es el 20 por ciento, pero en algunas zonas es la mayor parte de la producción, por ejemplo en la Meseta Purépecha, en la zona de Zacapu, en las partes altas de Contepec, Epitacio Huerta, se siembran muchos criollos, todos los valles altos que están arriba de los mil metros no hay híbridos, la mayoría son criollos”, detalló.
En este contexto, rechazó que en el estado se de la siembra de maíz transgénico, ya que no está permitido, pese a que estudios del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) en el 2018, al llevar cabo un muestreo estratificado en la Ciudad de México, Michoacán, Oaxaca, Chiapas y Veracruz, identificaron algunas cantidades pequeñas de transgenes.
Aseguró que se siembran maíces criollos, variedades e híbridos, estos últimos resultado de la mejora genética mediante el cruce de dos o más especies, “el aumento de maíz como la variedad de granos amarillos, son maíces híbridos y forman parte de la variedad de granos que se producen en el estado como es el maíz azul o el morado; el maíz palomero es un criollo amarillo, entonces como hay híbridos, hay variedades mejorados, es el caso del amarillo”, indicó.
En este contexto, dijo que las mujeres son aliadas en la preservación del maíz criollo, ya que son quienes conservan las semillas como parte de la alimentación que garantizan a sus familias, sumado a que no tienen competencia por su resistencia a climas y condiciones de la tierra.