Realizar una cena familiar, las tradicionales 12 uvas para los propósitos del siguiente año, salir con maletas a la calle o meterse debajo de una mesa para hallar pareja, fueron parte de las supersticiones con que los morelianos recibirán el 2023.
Aunque algunas personas se mostraron escépticas a la ropa interior de colores para llamar a la riqueza, el amor o la abundancia y prefieren viajar o recibir el año festejando con alcohol.
La moreliana María Guadalupe Gutiérrez Zúñiga mencionó que al dar las 12 realizan con su familia algunos rituales para asegurar los viajes, llamar el amor y sacar las las malas vibras del 2022.
“A partir de la fiesta familiar, acostumbramos algunos rituales. Sacamos una maleta para asegurar los viajes. Los que estamos solteros nos metemos abajo de la mesa y barremos de adentro hacia afuera para sacar las malas vibras y las doce uvas”.
Algunos como Víctor Hernández y su familia prefieren la reunión familiar, en la que comparten 12 uvas para desear paz, trabajo, amor y salud.
“Nosotros hacemos lo tradicional, lo que es la cena en familia. Comemos las uvas, deseándoles lo mejor para toda la familia”.
Otros, tienen una tradición menos ortodoxa, en la que prefieren la cerveza, el tequila y festejar para despedirse de las malas vibras, dijo Alexis Ayala.
“¡Uh!, pues nosotros acostumbramos hacer una peda. La tradición, cerveza, tequila, lo que caiga, para festejar y decirle adiós a las malas vibras”.
También hay quienes creyeron en las tradiciones de Año Nuevo y fallaron en el intento. Los altos precios de las uvas o los malos resultados de la ropa interior usada, han determinado en la familia de Jorge Luis Bedolla a priorizar la unidad.
“Nosotros nunca hemos utilizado eso. Las uvas las usamos como 2 años, pero después subieron de precio pero ya no. Lo mejor es pasársela en familia. Una vez usé lo del color rojo, pero ahí ya no”.