Entre reclamos y protestas, el mandatario estatal, Alfredo Ramírez Bedolla, encabezó un mitin partidista en el marco de su Primer Informe de gobierno, que tuvo como escenario la Plaza Valladolid de la capital michoacana, en donde se dijo convencido de que Michoacán ya recuperó el rumbo.
En materia de economía destacó que su gobierno con honestidad, transparencia y austeridad, contrasta con los derroches de años previos y ha permitido lograr ahorros que, a su vez, han hecho posible que este año se tenga garantizado el recurso para cerrar sin adeudos este 2022, principalmente con los trabajadores de salud, educación y la Universidad Michoacana.
Dijo que con estos esfuerzos, se demuestra que se están haciendo bien las cosas en Michoacán, sumando otro logro que ha sido combatir la corrupción, a lo que dijo, es intolerante.
Al grito de “Mentiroso, mentiroso”, un reducido grupo de estudiantes normalistas intentaron irrumpir el mitin, tras lograrse filtrar al evento y con pancartas, exigieron solución a sus demandas de plazas, así como la falta de docentes en centros escolares, pero los simpatizantes de Morena organizaron porras para opacar la protesta.
Por su parte, el Ejecutivo del estado no hizo una referencia directa a los inconformes, aunque en su mensaje enfatizó y dejó en claro que en Michoacán ya se acabó el huachicol de plazas docentes, además de que ahora los estudiantes que quieren ingresar a las escuelas normales deben hacerlo por medio de un examen CENEVAL.
Afirmó que a él no le asustan los gritos, ni tampoco la corrupción, por lo que aseveró que en su administración no se dejará chantajear por nadie.
En el marco de su primer informe, el gobernador de Michoacán recalcó que su gobierno está comprometido con los pueblos indígenas, los trabajadores del campo y las mujeres del estado.
Tras referir que la entidad necesita de unidad, reconciliación y armonía, se comprometió a no fallar, no robar, no mentir y no traicionar al pueblo de Michoacán.