Con muy poca afluencia, lucieron los macro módulos habilitados para la jornada de vacunación contra el COVID-19 para los menores de 5 a 11 años de edad en Morelia, en donde por ratos se encontraron prácticamente vacíos.
Luego de casi una semana de inmunización, fueron pocos los padres y madres de familia que a última hora optaron por acudir a vacunar a sus hijos, con la finalidad de evitar las largas filas.
Tal fue el caso de la señora Guadalupe, quien arribó a la Unidad Deportiva “Ejército de la Revolución” en compañía de sus hijos alrededor de las 9 de la mañana, donde tardó no más de 20 minutos desde que ingresó hasta finalizar la aplicación del biológico, por lo que se manifestó más tranquila por proteger la salud de sus hijos, ante el rebrote de contagios y estando aún en clases presenciales.

“Esta mejor porque ya ahorita los niños van a estar protegidos, ahorita está todavía la alza de contagios por el COVID, y protegidos ya estaremos más tranquilos ahorita que están en la escuela presencial”.
Carlos Cortés, de 11 años de edad, el haber recibido su primera dosis, le genera menos preocupación esta pandemia y más aún el que la mayoría de la población ya esté vacunada.
“Bien porque ya no voy a tener que preocuparme tanto por eso, y también porque cada vez se van vacunando más”.
En Ciudad Universitaria también registró poca afluencia y de manera paulatina conforme avanzaba la mañana, los morelianos acudían a vacunarse, como Edwin Gómez, quien se dijo muy satisfecho de haber sido corresponsable con la salud de los demás y aunque sólo le dio un poquito de miedo, se portó como todo un valiente y soportó el piquete de su vacuna.
“Muy bien, me dio un poquito de miedo pero nada mas, no me dolió”.

Para quien representó todo un alivio que su hija recibiera la vacuna anti COVID fue Julio Villa, y aunque en algún momento cabe la incertidumbre de recibir un químico en el cuerpo humano, la ciudadanía dijo, tiene que evolucionar ante pandemias o enfermedades nuevas que van surgiendo, por lo que dijo no temer a una posible reacción adversa de la vacuna.
“La vacuna es un químico y hecho por gente que estudia eso, yo creo que sí cabe en muchas ocasiones la incertidumbre pero es un arriesgue que tenemos que correr, así empezamos las primeras vacunas y las pandemias y tenemos que evolucionar”.
De manera general, tanto padres y madres de familia calificaron con buenos ojos la organización de esta jornada al ser ágil y empática con los menores.