Tras derribar parte del “Monumento a los Constructores” este lunes 14 de febrero, el Consejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM), dio a conocer que por consenso comunal de la Asamblea General de Autoridades Indígenas, por unanimidad se acordó la remoción de la escultura.
A través de un comunicado, responsabilizaron al ayuntamiento de Morelia, por el derribo de la escultura, al señalar que las autoridades municipales se negaron a atender la solicitud de reubicación que se efectuó de manera formal y por escrito el 23 de septiembre del 2020.
Las autoridades indígenas, denunciaron que la captura de 24 de sus compañeros, entre los que se encontraban 18 comuneras y comuneros, 3 estudiantes y 3 menores de edad, fue “totalmente arbitraria”, al señalar que la detención no se concretó en el lugar de los hechos y que fue violado el derecho a la presunción de inocencia al ser fotografiados.
Así mismo, anunciaron que se encuentran en una etapa de informar y consultar a las comunidades originarias, para definir de manera conjunta “el quehacer comunal ante la criminalización de que fueron objeto, compañeros y estudiantes por parte del ayuntamiento de Morelia “, para que una vez que se tengan las resoluciones de las asambleas, se realice un plan de acción colectivo.