Miles de menores de 15 a 17 años de edad, acompañados de hermanos, padres y amigos, hicieron filas kilométricas en las inmediaciones del Recinto Ferial en Morelia, para recibir la vacuna contra el COVID-19, que empezó a aplicarse cerca de las 10:00 de la mañana de este 2 de diciembre.
La jornada de inmunización logró una aglomeración de personas nunca antes vista en esta zona, que generó a su vez un tremendo tráfico vehicular durante cerca de 10 horas, aunque los primeros en formarse llegaron casi 24 horas antes.
Asistentes manifestaron su inconformidad con la desorganización que privó durante toda la mañana, sin que existiera ninguna persona que les proporcionara alguna información y ante el riesgo de contagio por la falta de sana distancia.
Entrevistado entre el ir y venir de los asistentes, Fidel Alejandro, calificó “caótica” la organización de la jornada de vacunación y dijo incomprensible “que no se pongan más centros de vacunación”.
“Sobre todo cómo está el tráfico puede provocar un brote.”
Parte de un grupo de amigos que asistieron juntos, Sofía y Jezerai consideraron que las vacunas “previenen muertos”, pero se quejaron de la organización.
“Está pésima la organización, la verdad, mucho tráfico y vienen personas que ya llegaron a las 8:00 en punto y están pasando primero”.
Jóvenes y adultos manifestaron su disposición a esperar y correr riesgos, con la única esperanza de prevenir un contagio.
Cándido Mora Pérez, llegó con su hijos, sobrinos y prima, con quienes soportaron el intenso frío de la madrugada, luego de que padeció los efectos del COVID, junto con su esposa, “que se puso mala y estuvo 2 semanas en cama”.
A las 9:00 de la mañana, el enojo fue en aumento ante la tardanza para iniciar la jornada de vacunación.
“Nos amanecimos desde las 8:00 de la noche y nos dijeron a las 8 de la mañana y aún todavía nada, nos está fallando el Ejército y aquí estamos todos inconformes. Todos nos amanecimos aquí”.
La desorganización continuó en el ingreso al recinto, donde la aglomeración de personas no se pudo controlar, aunque en el lugar donde se aplicó la vacuna no se permitió el acceso de familiares, quienes esperaron y a distancia tomaron videos y fotografías del momento.
Tras prácticamente un día de espera, Ramón fue de los primeros en vacunarse y aunque primero manifestó cierto temor, tras recibir el biológico manifestó cierta tranquilidad.
“Me dio un poco de miedo, porque tengo una enfermedad, mi corazón se acelera mucho de repente y a lo mejor muy complicado tranquilizarme, no me dolió al principio, pero todo bien, ya más tranquilo”.
Aunque con caos, la fila comenzó a avanzar con mayor celeridad cerca del medio día y aunque parecía interminable, cerca de las 5:00 de la tarde había prácticamente desaparecido, luego de que se reportó que se aplicaron 13 mil 643 dosis.
