La PCR (Reacción en Cadena de la Polimerasa, por sus siglas en inglés), es una prueba que detecta de forma inequívoca un pedacito del material genético de un ser humano, una bacteria o un virus (entre otros seres vivos).
Desde finales de la década de los años 80, la PCR ha sido indiscutiblemente uno de los mejores desarrollos y avances científicos dentro de las ciencias biológicas, por su enorme utilidad, sobre todo en el diagnóstico de enfermedades que antes no era posible identificar de forma certera.
Los científicos que desarrollaron esta maravilla fueron el químico inglés Michael Smith y el bioquímico estadounidense Kary Mullis, quienes fueron ganadores del Premio Nobel en Química en 1993, por su inmensa contribución en beneficio de la humanidad a través de la PCR.
En el caso de la COVID-19, la prueba es capaz de detectar al virus a partir de las 48 horas después de haber comenzado con los síntomas, o bien aun siendo asintomático, toda vez que se cumplan las condiciones y criterios indicados por la Organización Mundial de la Salud, mismos que puede leer en la entrega anterior, escrita por su servidor.
La PCR ofrece resultados confiables, por lo que no es necesario realizarse las otras pruebas para la COVID-19. Esto se debe a su alta especificidad para detectar al virus.
Por otro lado, no es necesario realizarse más pruebas de PCR una vez que se ha cumplido el tiempo de aislamiento y medidas generales que su médico le ha indicado, debido a que es muy probable que queden restos del material genético del virus, dando un resultado positivo, sin embargo, esto no quiere decir que usted se encuentre todavía enfermo.
Para finalizar, quiero decirle que, si usted desea realizarse esta prueba, es necesario que acuda primero con su médico, para que sea él o ella quien determine si es necesario o no hacérsela.
Muchas gracias por seguir leyendo estas breves notas, nos vemos en la próxima.