El nuncio apostólico, Franco Coppola consideró que la ola de violencia e inseguridad que vive Michoacán, principalmente en el municipio de Aguililla, se debe al abandono de la autoridad civil, ya que de acuerdo a la experiencia que tiene en Italia, la corrupción penetró a las estructuras del gobierno.
Al concluir la celebración eucarística, reiteró que en este municipio y sus comunidades, el contexto actual es por el vacío del Estado, al ejemplificar que con la presencia de la policía estatal, “cuando se quiere se puede”.
“Si definitivamente, me permito decirlo, no porque conozca los hechos sino por analogía, y una de las cosas malas que hemos exportado en Italia es la mafia y sabemos donde se implanta y donde florece la mafia que es donde el estado no está y que tratan de apoderarse e imponerse, y eso ha pasado en Italia, me imagino que algo similar pasa en México”.
Aseguró que con su visita no ha venido a desafiar a nadie, y tampoco teme por su integridad al referir que ha participado en este tipo de celebraciones en otras comunidades que viven fenómenos de violencia similares al que hay en Aguililla.
Sostuvo que por ahora, tiene una agenda programada desde El Vaticano para visitar las poblaciones con los mayores episodios de violencia a causa del crimen organizado.
Asimismo, explicó que no hay ninguna instrucción hacia el obispo Cristóbal Ascencio para que se de atención oportuna, orientación o guía a las familias michoacanas desde el confesionario o el púlpito.