Cada uno de los 600 pares de zapatos, simboliza a una mujer asesinada que no llegó a su hogar… que dejó sola a una madre, un padre, un hijo o un hermano, víctima de la violencia.
“Mi familia no perdona, mis amigas no perdonan, Morelia no me olvides”, se lee en la manta que se colocó en las primeras horas de este lunes en la puerta principal de palacio de Gobierno, en demanda de justicia para Jessica González Villaseñor, la joven de 21 años que fue asesinada el pasado 21 de septiembre víctima de numerosos golpes en el cuerpo y de violencia sexual.
La manifestación es inédita para la capital michoacana, los zapatos rojos cubrieron la parte central de la avenida Madero, como un recordatorio del grado de violencia que sufrió Jessica antes de morir, con más de 30 golpes en el cuerpo y uno en el cráneo que le arrebató la vida.
Su madre Verónica Villaseñor y su papá Martín González, encabezaron la protesta a distancia; Cristo, uno de los 2 hermanos de Jessica, recuerda que este lunes se vence el plazo que otorgó el juez de control el pasado 1 de octubre para que la Fiscalía realizara la investigación del caso.
Relata que la instancia judicial ya les ha confirmado que solicitará una prórroga de 2 meses para continuar con la investigación, a lo que se manifiesta respetuoso, pero con la necesidad de ejercer presión a la Fiscalía “para que siga haciendo su trabajo”.
“Como víctimas hay muchísimas omisiones que de alguna forma, como víctima puedes ver, y hay muchísimas trabas que de repente no estamos tan de acuerdo y entendemos que no está en manos de la fiscalía cambiar, pero también hay muchas cosas que se tienen que cambiar”.
Hace 4 meses, Diego Urik N. fue vinculado a proceso como presunto responsable del feminicidio de Jessica y su familia, lo único que demanda es una pena ejemplar para el culpable de su asesinato.
Ahora, se manifiestan inquietos, luego de meses de papeleo y procesos que deben seguir. Pese al dolor que viven acuden todos los días a la Fiscalía para conocer los avances que se tienen.
Clama justicia, aunque eso no le devolverá la vida a su hermana.
“Confío en que habrá justicia, pero sin embargo, el que haya justicia, no lo va a delimitar un juez sino la ciudadanía, porque de alguna forma, nosotros como familia, los años que le den a una persona no nos va a regresar a mi hermana, no nos va a quitar el dolor, porque no habrá una justicia justa que nos la regrese”.
Rodeado de las imágenes de su hermana en vida, exige una pena ejemplar, que inhiba la conducta de los agresores
“Muy muy muy doloroso, imagínate pesar desde que tu como hermano, la forma en que la mataron, imagínate mi mamá como lo puede vivir todos los días, en el pensar cómo fue asesinada mi hermana y que de alguna forma tenemos que luchar para hacer justicia”.
Más adelante, la fuente de las Tarascas, lucen con la cara cubierta con paliacates morados; zapatos rojos las rodean y una imagen de Jessica, recuerda a transeúntes y automovilistas la violencia con la que le arrebataron la vida a esta joven.
Este martes, un juez deberá decidir si procede o no la solicitud de prórroga de la Fiscalía General del estado.
Ante esto, la familia González Villaseñor se dice temerosa, pero no de la determinación de un juez sino de que este asesinato brutal quede en el olvido, que nadie recuerde la muerte de esta joven, que aseguraba que nadie debía vivir con temor.
